Escondida en la costa sur de Santorini, más tranquila, Mesa Pigadia es una de esas playas con las que no tropezarías a menos que supieras dónde buscar. Rodeado de espectaculares acantilados volcánicos de color negro y rojo, está menos pulido que los lugares famosos de la isla, pero eso forma parte de su encanto. Encontrarás guijarros suaves, aguas cristalinas y la emblemática syrmata, que son casas-barco con forma de cueva excavadas en la roca. Tanto si llegas por carretera como si echas el ancla aquí en un crucero en catamarán, es un trozo tranquilo y crudo de la costa de la caldera por el que merece la pena reducir la velocidad.